. index .

03 . Escándalos en los humedales del río Luján en Escobar

02 . Carta Doc al Gob. Solá sobre hidrología de acuíferos y de humedales

01 . Notas de La Nación del 2008 y Ley 25688, régimen ambiental de aguas

0 . Vieja introducción del 2010 y proceso de delineación de humedales

1 . Enfoques técnicos y legales

2 . Humedales al uso nostro

3 . Criterios legales código civil y ley 11723. Daño a los suelos

4 . Wetlands, aprecios de textos en inglés

5 . Clean waters acts

6 . Major causes of wetland loss and degradation

7 . A Global Overview of Wetland Loss and Degradation

8 . declamada "sustentabilidad" hidrológica e hidráulica

9 . Historiando humedales en planicie intermareal

10 . Historiando humedales en planicie intermareal

11 . Fragilidades de la memoria

12 . Reconocimiento a Costantini

13 . Carta doc al Gob. Scioli

14 . Proyecto de ley S-1.628/13 de Ruiz Díaz y S.-3.487/13 de Giustiniani

15 . Observaciones a una síntesis de los Fundamentos de estos proyectos

16 . Ley de humedales Proyecto CD-131/13

17 . Necesidad de Precisiones en ecología de ecosistemas y definiciones

18 . Antecedentes europeos, norteamericanos y mejicanos

19 . Sistemas acuáticos termodinámicos olárquicos naturales abiertos

20 . A una ley de ecología de ecosistemas, pre-ambiental de aguas

21 . Cartas Doc al Gob. Scioli del 2008 y a la Soc. Central de Arquitectos

22 . Ensanche propuesto para el río Luján

23 . Declaración de Zona Crítica de Protección Especial. Asamblea 17/8/08

24 . Anexo de criterios para esta convocatoria

25 . Líneas de ribera ecológica, rural y urbana. Reforma art 235, inc C CC

26 . Lo + elemental

27 . vicisitudes legislativas en abismos cognitivos elementales

28 . Renovada introducción a Fundamentos

29 . De nombradías

30 . Ley de humedales abreviada

31 . A la ley de humedales . Prefacio

32 . Informe sobre la ley de humedales . CD-405/16

33 . De una reunión de Bergman en el CCK

34 . De los recursos adiabáticos en sistemas naturales

35 . Previo a los inventarios

36 . Balance de cuencas . Enlace ríos Paraguay-Paraná

37 . Aguas del Iguazú, Iberá, Aguapey, Miriñay y Uruguay. Aportes Bermejo

38 . Humedales del Uruguay inferior y crímenes Paraná de las Palmas inf.

39 . A las cuencas enlazadas del Salado

40 . De la cuenca de los ríos Iº, IIº y IIIº.

41 . Grandes trabas geológicas

42 . Humedales pat-agónicos en energías de ríos Atuel, Negro y Santa Cruz

43 . Sedimentaciones profundas más allá de la salida del estuario del Plata

44 . A la ley de humedales . Ejemplo radical de definición ascética

45 . Inventario de los errores

46 . Propuestas para la ribera de Buenos Aires

47 . Al concepto de ribera

48 . El orden de los factores que pesan en las lecturas de línea de ribera

49 . Semánticas, semiologías, doctrinas y analogías sobre cauces y riberas

50 . Reclamos por el camino de sirga

51 . Línea de ribera sumergida. Sus velados compromisos ecológicos

52 . Causa CSJ 769/2020 sobre el Reconquista y Aliviador

53 . Observaciones críticas a la sentencia CSJ 304/2006 y a jurisprudencias

54 . CSJ 791/2018 sobre el triste destino mediterráneo de Buenos Aires

55 . CSJ 770/2020 sobre el criminal destino de las tomas de agua de AySA

. index .

Humedales

Inventario de los errores

En el marco de los inventarios cabe un primer enfoque que refiera del 1º de los enunciados del par 2ºº, art 6º, ley 25675. El que señala la obligación de mirar por el equilibrio de las dinámicas de los sistemas ecológicos.

A los ríos y esteros tributarios del estuario del Plata.pdf

A esta 1ª obligación va este enfoque sobre los

Humedales al Sur de Concepción

Al silencio de las lentitudes del curso
Ninguna referencia da cuenta de la calidad energética de sus aguas: si gravitacional o convectiva. Y lo primero que salta es la gran diferencia de provisión de recusos convectivos con que cuenta; muy por debajo de los que reconoce el Paraná en infinidad de esteros que le acompañan.

Por ello, el sistema se mueve con más lentitud que el Paraná. Y si a ésto le sumamos la represa de Salto Grande liquidando todos los acopios de energías convectivas que el Uruguay había sumado aguas arriba, el resultado es un río de aguas lentas.

Cuando Salto Grande recibe mucha agua no tiene más remedio que dejar pasar. Pero vuelvo a repetir: habiendo liquidado esta presa las reservas de energías convectivas, todo lo que sigue aguas abajo –con grandes o pequeños caudales-, es con aguas desposeídas de esas energías que ya antes de que se construyera la presa eran de menor carga convectiva que las del Paraná.

Este concepto de mirar por la clase de energías presentes en las aguas jamás se consideró en modelo matemático alguno. Allí todo es gravitacional. Por supuesto, cuando modelaron la presa, jamás pensaron en el robo que hacían al sistema de estas ya escasas energías en el Uruguay.

La pendiente desde Salto Grande al estuario resulta de unos pocos milímetros por Km. Por ello, todo el sistema se mueve merced a energías convectivas (no gravitacionales. Con pendientes promedio de 3 mm por Km no hay energía gravitacional que valga. Sin embargo, todos los modeladores van por Newton.

El Uruguay tiene caja sobrada para movilizar y soportar grandes caudales. Pero las aguas no tienen la virtualidad para sacar provecho de esa caja “hidrodinámica”, que poca o ninguna virtud “termodinámica” en sus márgenes le acompaña.

Tener el ojo ejercitado para seguir estos análisis, con la adicional brevedad con que hago este repaso, es algo más que improbable alguien me siga.

25/12/2015. FJA

Siguen un par de gráficos de las muy bajas velocidades y variaciones en los perfiles de fondo en el tramo entre Colón y Concepción del Uruguay, del estudio de Cardini Zabalett, Oliver y Mársico

Observaciones a los comportamientos estacionarios

La cuenca superior del río Uruguay reconoce muy buenas pendientes (43 cm/Km en promedio y velocidades de hasta 13 Km/h). No así la cuenca media (9 cm/Km en promedio y velocidades de hasta 2 Km/h) y mucho menos la cuenca que sigue a la represa de Salto Grande, con pendientes bien menores a 1 cm/Km (y adicionales energías mareales contrapuestas a la altura de Nueva Palmira con velocidades de reflujos de 1 a 3 Km/h).

Si en adición recordamos que cualquier tipo de presa interrumpe de plano cualquier sistema convectivo que hubiera hecho acopio de tales energías en aguas superiores; al tiempo que también recordamos que las aguas que salen de la presa lo hacen con temperaturas menores a las de las aguas caldas con las que a poco se van reconociendo disociadas;

de aquí cabe recordar que bien pronto se esfuman los impulsos de la caída y sobreviene la calma propia de un sistema convectivo destruído; y en adición, con aguas térmicamente disociadas que marchan con el gradiente inverso propio al de los sistemas convectivos. Estos que reconocen advección en función de un gradiente térmico de ligera menor temperatura, y aquí, reitero, se da la situación contraria: sale más fría de la presa que las aguas que encuentra río abajo.

La desorganización del sistema luce a lo largo de los primeros 100 Kms que siguen a la presa. Por ello, hasta Colón, a pesar de las fenomenales erogaciones de la presa en eventos máximos, todo se reconoce “estacionario”, aún en las grandes crecidas como las del 2015

Por fin, 10 Kms antes de Colón comienzan las aguas a recibir energías convectivas de las riberas a la altura del río Queguay y de allí en más y por los siguientes 120 Kms lo encuentran recuperando energías convectivas.

Los aportes más importantes le vienen acercados por los humedales que siguen a Concepción del Uruguay hasta llegar a Puerto Unzué A ellos dedicamos este hipertexto. Enfrente mismo, los de la ribera uruguaya, los esteros de Farrapos son considerados Parque Nacional.

A partir de Fray Bentos reconoce 80 Kms de aportes convectivos casi exclusivos de la ribera argentina. Para terminar encontrándose a la altura de Nueva Palmira con el tapón de cierre del antiguo estuario generado por los avances del sistema Paraná, ríos Gutiérrez, Bravo, Sauce y Guazú.

Beneficiados éstos con sus grandes cargas sedimentarias y reflejos éstas de las ricas energías convectivas que los transportan. Nada tiene el pobrecito Uruguay que hacer con semejantes diferencias energéticas, salvo ajustar su famélico esqueleto convectivo a circular pegadito a la ribera uruguaya en un corredor que apenas supera los 200 m de ancho.

Ver a semejante cuenca apretada contra la pared sin que nadie diga una palabra de estos avatares geológicos, ya indica la hora de prospectivar el avance de sus consecuencias.

Esas prospectivas primarias caben en el estrecho paso que sigue a Nueva Palmira y en el paso final de Martín García. Estos dos lugares son puntos de observación claves para cualquier estudio de hidrología termodinámica de esta cuenca.

Que reitero, no son de admirar con ojo mecánico, sino termodinámico de sistemas naturales abiertos y enlazados.

Seguir ignorando la presencia y las funciones elementales y primordiales del sol en los sedimentos y en las aguas que los transportan, es vivir en Marte o aún más lejos. La mecánica de fluidos es cosa de plomeros que nada tiene que ver con la historia y la Vida de este planeta. Es una abstracción cartesiana haciendo uso y abuso del pensamiento analógico, para simplificar las cosas y mentirse a sí mismo.

No es observación, sino fabulación a secas; sin calor, ni agua. El agua y el calor tienen miles de millones de años haciéndose compañía en este planeta. Es inviable hacer geología sin mirar por ambos. Siempre interactuando. Los sedimentos son sus cronistas.

Y por favor, cuando infieran de las erodona macroides la vigencia de climas más cálidos, no olviden que los senos entre cordones emergidos son lugares donde estos moluscos, al igual que los niños pequeños disfrutan de las aguas someras y super cálidas que recogen esos senos.

Y cuando infieran que las acreencias territoriales fruto de cordones litorales, también hablan del descenso del mar, ahórrense estas inferencias. No es necesario que el mar descienda para que los bordes continentales vean bordar esas acreencias.

Por supuesto, si descubren que todo el holoceno está dando testimonio de estos moluscos y de aquí deducen climas mucho más cálidos, cómo no deducir que con semejantes climas no fuera todo más árido y el löss fuera eólico. Pues han imaginado Venus gracias a estas erodona macroides y a la mecánica de fluidos imaginando generación de cordones merced a la dichosa ola oblicua. Vean este video y miren por la dirección de la ola oblicua: https://www.youtube.com/watch?v=qQKFjA41fH0

Mientras las erodona macroides disfrutaban en los charquitos de los senos entre cordones litorales emergidos, los tributarios seguían haciendo su trabajo sin necesidad de imaginar esa radicalización del clima que la geología pampeana ha imaginado por décadas.

Los suelos pampeanos no responden a löss eólico, sino a löss fluvial. Los abismos conceptuales que cargan la mecánica de fluídos, la sedimentología y la dinámica costera surgen de mentar hidrologías sin considerar ecologías de ecosistemas en planicies extremas con elementales funciones termodinámicas naturales y abiertas, recordando que los sedimentos -y no las economías cartesianas-, son sus invalorables cronistas.

Un testimonio de ello, los viajes extraordinarios de 5000 kms de los sedimentos del Bermejo hasta los 5700 m de profundidad merced a sistemas convectivos de aguas dulces disociados de las aguas saladas. Transportes y deposiciones que nada sostienen de aportes mecánicos de ola oblicua.

Con los debidos agradecimientos a Alflora Montiel Vivero, Estela Livingston

Francisco Javier de Amorrortu, 30 de Diciembre del 2015

Aportes sedimentarios de la ribera occidental

En este gráfico superior se advierte que las acreencias occidentales sobre el río Uruguay son muy superiores a las orientales y por ello debemos ser más cuidadosos con las dinámicas de estos humedales. Ver antecedentes:

 

36.200 Has de humedales a proteger

Aréas de forestaciones inmediatas al Norte

Al Oeste del terraplén del puente

Justito donde empiezan los humedales

Bloqueo consolidado con 600 m del terraplen de la ruta del puente

En este preciso lugar donde inscribo la leyenda de estos crímenes, los planos de 1847 que veremos más adelante nos señalan el canal de navegación con profundidades de 60 pies (18 metros), las mayores del área

Terraplenes del lado argentino. El 23 de agosto de 1972, al año siguiente a la convención de Ramsar fue suscripto el contrato de construcción de la obra con el Consorcio Puente Internacional COPUI, adjudicatario de los trabajos por Licitación Publica Internacional, concedidos a la República Argentina y a la República Oriental del Uruguay

Forestaciones que parecen obra de García Uriburu

 

 

Calidad de las cartas náuticas del Ministerio de Obras Públicas de la Nación de 1910

 

Siguen cartas de 1847 (172 años), 1865 y 1910.

Al inicio a la derecha los humedales en cuestión mostrando hasta 60 pies de profundidad donde hoy plantamos árboles. El "Canal de los pilotos", el de mayor profundidad, pasaba precisamente al lado de donde ahora plantamos una cruz.

Hidrografías de 1865, con aportes de Sulivan y Philomel de 1845 y Sidney de 1857. Con adiciones de Page y Water Witch de 1855 y Hunter de 1864

 

 

Cartografías de 1970

12/1/2012

24/6/2009

18/7/2006